El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha afirmado este viernes en una reunión con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad del país que todo el mundo está observando cómo los equipos militares occidentales arden y que incluso son inferiores en algunos aspectos a los soviéticos.
Se han entregado más de 2 mil piezas de equipo y armamento, incluidos cientos de tanques, sistemas de lanzacohetes múltiples Grad y Uragan, sistemas antiaéreos Pantsir, sistemas de artillería autopropulsada, vehículos blindados de transporte de tropas y otros, comunicó el Ministerio de Defensa de Rusia.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, mantuvo una reunión con el jefe de la empresa privada militar Wagner, Evgueni Prigozhin, el pasado 29 de junio en el Kremlin, declaró el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Las potencias occidentales vieron en la rivalidad entre Evgueni Prigozhin y el general Serguéi Choigu ministro de Defensa de la Federación Rusa la oportunidad de dividir a Rusia, plan que tienen trazado desde julio del año pasado.
De acuerdo con el líder ruso, desde el principio de los acontecimientos, las autoridades tomaron medidas siguiendo sus “instrucciones directas para evitar un gran derramamiento de sangre”, así como para dar “a los que se habían equivocado” la oportunidad de comprender que “sus acciones eran firmemente rechazadas por la sociedad y a qué trágicas y devastadoras consecuencias para Rusia y para nuestro Estado conducía la aventura en la que se habían metido”.
El presidente ruso, Vladímir Putin, se dirigió a la población del país tras el intento de amotinamiento armado perpetrado por el Grupo Wagner, liderado por Evgueni Prigozhin el 23 de junio.