La primera ministra de Lituania, Ingrida Simonyte, admitió que su Gobierno había sido “un poco optimista” al esperar que Kiev “defendiera realmente tanto a Europa como los valores occidentales”.
Con su suministro de armas occidentales menguando y pocas señales de cambio por parte de las potencias de la OTAN, Ucrania será incapaz de lanzar otra contraofensiva.
El exasesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos considera que los dirigentes estadounidenses deben preocuparse por una “ofensiva diplomática rusa”.
El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, admitió que sus combatientes no pudieron lograr avances significativos en su fracasada contraofensiva. “Queríamos resultados más rápidos. Desde esa perspectiva, lamentablemente no logramos los resultados deseados. Y esto es un hecho”, aseveró.
Los periodistas británicos admitieron que la victoria de Rusia no solo es posible, sino también probable, ya que el presidente ruso Vladímir Putin hizo todo lo posible para lograrlo: puso al país en pie de guerra y fortaleció su poder. Así lo afirma un nuevo artículo de The Economist.
Los mayores suministradores de armas a Kiev van racionando las entregas para que Zelenski se dé cuenta de que no podrá recuperar los territorios perdidos ante Rusia, según una fuente gubernamental alemana.
En total, desde el comienzo de la operación especial fueron destruidos 542 aviones militares ucranianos, 255 helicópteros, 9 mil 263 drones, 442 sistemas de misiles antiaéreos, 13 mil 659 tanques y otros vehículos blindados de combate. Igualmente, según el Ministerio de Defensa ruso, fueron eliminados 1 mil 185 vehículos de sistemas de lanzacohetes múltiples, 7 mil 194 cañones de artillería de campaña y morteros, así como 15 mil 698 vehículos militares especiales.