Un carguero ruso fue visto el mes pasado en la base naval más grande de Sudáfrica, desatando preocupaciones en EE.UU. y tensando las relaciones entre Pretoria y Washington. En ese contexto, la ministra de Defensa del país africano, Thandi Modise, señaló que EE.UU. “amenaza a África, no solo a Sudáfrica, por tener algo que huela mínimamente a Rusia”, recoge The Wall Street Journal.