La deuda por persona de cada uno de los mexicanos seguirá creciendo y se prevé que aumentará 6 mil pesos los próximo años, pasaría de 120 mil pesos en 2022 a 128 mil pesos en 2028. Este hecho, pone en duda la sostenibilidad fiscal de largo plazo, afirmó Ricardo Cantú, investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).