En el marco de la conversación, el presidente ruso y el periodista estadounidense abordaron una amplia variedad de temas, como el conflicto en Ucrania, la expansión de la OTAN y la explosión de los Nord Stream.
El portavoz del Ministerio de Defensa de China, Wu Qian, calificó a la OTAN como una “máquina de guerra andante” que esparce el caos por donde va. Además, agregó que China siempre aspirará a reunirse pacíficamente con Taiwán, pero tomará medidas decisivas si los separatistas taiwaneses cruzan las “líneas rojas”.
La cartera de Defensa rusa detalló que, en total, llegaron a luchar del lado de Ucrania más de 13 mil 500 mercenarios extranjeros, más de 5 mil 900 de los cuales fueron eliminados.
La primera ministra de Lituania, Ingrida Simonyte, admitió que su Gobierno había sido “un poco optimista” al esperar que Kiev “defendiera realmente tanto a Europa como los valores occidentales”.
Con su suministro de armas occidentales menguando y pocas señales de cambio por parte de las potencias de la OTAN, Ucrania será incapaz de lanzar otra contraofensiva.
El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, admitió que sus combatientes no pudieron lograr avances significativos en su fracasada contraofensiva. “Queríamos resultados más rápidos. Desde esa perspectiva, lamentablemente no logramos los resultados deseados. Y esto es un hecho”, aseveró.
El reciente ataque de Kiev contra la ciudad rusa de Sebastopol, ubicada en el sur de la península de Crimea, fue perpetrado con la cooperación de los servicios de inteligencia militar de Washington y Londres, declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.
Pekín no entrará en este “juego de aranceles sin sentido”, pero si Estados Unidos insiste en infringir los intereses chinos, “contratacará y luchará hasta el final”, aseguró.
La producción industrial de China registró un robusto crecimiento en marzo, ya que la recuperación económica del país cobró impulso en medio de los esfuerzos del Gobierno para apoyar el crecimiento y contrarrestar los vientos en contra de la economía exterior.
Pekín no entrará en este “juego de aranceles sin sentido”, pero si Estados Unidos insiste en infringir los intereses chinos, “contratacará y luchará hasta el final”, aseguró.