La ocupación terrorista sionista, apoyada por Estados Unidos, Gran Bretaña y Occidente, continúa sus crímenes sin descanso. Atacando a los niños de Gaza día y noche, bombardeando sus hogares, destrozando sus cuerpos y dejándolos bajo los escombros, sin que el mundo hipócrita siquiera pestañee. Un mundo que dice defender los derechos humanos, pero se vuelve ciego y sordo cuando la víctima es un niño palestino.
Alemania ha introducido una serie de restricciones en los actos conmemorativos en Berlín con motivo del 80º aniversario de la victoria en la Gran Guerra Patria.