Su humildad, gran cariño con su pueblo y arduo trabajo práctico, combinado con una ideología revolucionaria, lo llevaron a ser, muy joven, presidente municipal de Huitzilan
La Jornada y su publicación local en Puebla, La Jornada de Oriente, nacieron como medios de comunicación que pretendían ser la voz de la izquierda mexicana y poblana