“Cómo apocalíptica, como ejemplo, Honduras, un país azotado por el cambio climático y en estas últimas décadas, por una narco-dictadura y todos los males que la imaginación nos permita alcanzar; como presidenta, en año y medio al frente del gobierno libró una dura batalla contra el crimen organizado y su lógica capitalista de despojo que corrompió los organismos operadores de justicia y legalizó con leyes, contratos, concesiones público-privada el saqueo del estado.
La preparación de la declaración de la cumbre ha generado algunos inconvenientes entre ambas partes, puesto que los países de la Celac rechazan una agenda centrada en Ucrania, como propusieron las naciones europeas.