En violación de la libertad de expresión, la CDU británico hizo que se retiraran de internet así como de las transmisiones de radio y de televisión de la BBC opiniones disidentes sobre el Covid-19, como las del profesor Carl Heneghan y Molly Kingsley y las del doctor Alexandre de Figueiredo sobre las medidas anticovid hacia los menores de edad.
El presidente ruso ya declaró que detrás de estos ataques se encuentra alguien "capaz de organizar las explosiones técnicamente y que ya recurrió a ese tipo de sabotajes, y fue pillado con las manos en la masa, pero quedó impune". Vladímir Putin también indicó que el incidente fue beneficioso para EE.UU., que ahora "puede suministrar recursos energéticos a precios más altos".
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia denunció el 29 de octubre que especialistas de la Marina Real británica están involucrados en los atentados contra los gasoductos en el mar Báltico.