De acuerdo con la última actualización del sistema de satélites europeo de monitorización terrestre Copernicus, la lava emitida por el volcán de la isla española de La Palma desde el inicio de su erupción el 19 de septiembre cubre 338.3 hectáreas, incluido el terreno que ha ganado al mar desde la noche del día 28,.
Según el recuento de Copernicus, en el que se evalúa en 29.8 los kilómetros de carreteras afectados, de ellos 27.4 están destruidos, las edificaciones afectadas por el magma se elevan a 981, de las cuales 855 están destruidas,.
Además de la lava, el sistema ha medido la superficie ocupada por la ceniza caída, que se extiende por mil 752.8 hectáreas.
Esta actualización corresponde a unas doce horas después de que el magma se precipitara por un acantilado en la zona de Los Guirres y empezara a formar un delta por las mediciones realizadas el 29 de septiembre a las 11:36 horas.
Algunos investigadores, meteorólogos y divulgadores están ya empezando a utilizar ese vocablo para referirse al nuevo paisaje que va a dejar en la isla la erupción en Cumbre Vieja debido a que el nuevo delta o “fajana” que se está formando en La Palma tiene ya medio kilómetro de ancho.
Ante esta última actualización, las autoridades han recomendado a los habitantes permanecer a salvo en interiores y utilizar mascarillas con filtro de protección personal FFP2. Las mediciones de momento no representan peligro para la salud, sin embargo estas recomendaciones van dirigidas a mujeres embarazadas, personas mayores o con afecciones respiratorias.
De momento, el equipo de bomberos forestales de la base del municipio de Puntagorda se han dedicado a ayudar a los ganaderos y agricultores para minimizar los daños ocasionados por el volcán durante las últimas horas.