En Rusia se detectó que un paciente con coronavirus infectó a 1.500 personas a la vez, lo que representa el caso máximo registrado en el país. Así lo informó Alexánder Semiónov, jefe de la sede de la ciudad de Ekaterimburgo del Centro Científico Estatal de Virología y Biotecnología Véktor en la ciudad de Ekaterimburgo.
«En Rusia, hay un caso máximo de ‘superspreading’ o superpropagación, cuando una persona infectó a 1.500 personas a la vez», indicó el experto a la agencia de noticias TASS del país.
Semiónov explicó que, según las estadísticas la variante original del coronavirus podía hacer que una persona contagiara a una o dos más, mientras que, en caso de la variante Delta, pueden aumentar esas infecciones contagiando a entre cinco y seis personas (aunque otros expertos hablan de hasta nueve). Por otro lado, un superpropagador puede infectar a mucho más que el número promedio.
«Todos entendemos que la infección por coronavirus se propaga por gotitas en el aire, es decir, se propaga al máximo a través de los contactos sociales», recuerda el especialista. En este sentido, advierte que, si una persona no respeta la distancia social ni usa mascarilla, va al «vagón del metro lleno, llega al trabajo y comienza a abrazar y besar a todo el mundo», entonces tiene la oportunidad de «convertirse en un supercontagiador e infectar a una gran cantidad de personas».
«Con su desprecio por las normas de distanciamiento social crea oportunidades para la superpropagación de la infección», asevera Semiónov.
Asimismo, el jefe de la sucursal señaló que «desafortunadamente, la contribución de los superpropagadores a la infección de las personas es bastante grande».
