Las cifras son preocupantes pues se espera que aproximadamente un millón de estadounidenses cada año, desarrollen demencia para el año 2060, alrededor del doble de la cifra actual.
La estimación se basa en un nuevo estudio que encontró un riesgo de por vida más alto de lo que se pensaba anteriormente ya que después de los 55 años, las personas tienen hasta un 40 % de posibilidades de desarrollar eventualmente demencia, si viven lo suficiente.
Es un número preocupante, pero hay medidas que las personas pueden tomar para reducir ese riesgo, como controlar la presión arterial alta y otros problemas de salud perjudiciales para el cerebro. Y no es demasiado tarde para intentarlo, incluso en la mediana edad.
Todos nuestros estudios sugieren que lo que haces en la mediana edad realmente importa, dijo el Doctor Josef Coresh de la Universidad de Nueva York (NYU), Langone Health, el sistema de salud académico integrado ubicado en NY con la Facultad de Medicina Grossman de NYU y la Facultad de Medicina Grossman Long Island de la NYU.
El coautor del estudio publicado en la revista Nature Medicine, señaló que tardar más en recordar un nombre o dónde pusiste tus llaves es típico con la edad avanzada, pero la demencia no es una parte normal del envejecimiento, es una pérdida progresiva de memoria, lenguaje y otras funciones cognitivas. Simplemente envejecer es el mayor riesgo y la población está envejeciendo rápidamente.
El Alzheimer es la forma más común y los cambios silenciosos en el cerebro que eventualmente conducen a él pueden comenzar dos décadas antes que aparezcan los síntomas. Otros tipos incluyen la demencia vascular, cuando la enfermedad cardíaca o pequeños accidentes cerebrovasculares afectan el flujo sanguíneo al cerebro. Muchas personas tienen causas mixtas, lo que significa que los problemas vasculares podrían exacerbar los síntomas incipientes del Alzheimer.
Medir el riesgo desde una cierta edad durante la vida útil restante potencial puede guiar las recomendaciones de salud pública y la investigación médica.
Estudios anteriores estimaron que aproximadamente el 14 % de los hombres y el 23 % de las mujeres desarrollarían alguna forma de demencia durante su vida. El equipo de Coresh analizó datos más recientes de un estudio estadounidense que ha rastreado la salud cardíaca y la función cognitiva de 15 mil adultos mayores durante varias décadas.
Más importante, encontraron que el riesgo cambia con las décadas. Sólo el 4% de las personas desarrollaron demencia entre los 55 y los 75 años, lo que Coresh llama una ventana clave de 20 años para proteger la salud cerebral.
Para las personas que sobreviven a amenazas comunes para la salud hasta los 75 años, el riesgo de demencia luego aumentó al 20 % a los 85 años y al 42 % entre los 85 y los 95 años.
En general, el riesgo de demencia de por vida después de los 55 años fue del 35 % para los hombres y del 48 % para las mujeres, concluyeron los investigadores. Las mujeres generalmente viven más que los hombres, una razón principal para esa diferencia, señaló Coresh.
Pero las personas pueden intentar evitar o al menos retrasar los problemas de salud que contribuyen a la demencia posterior. Coresh, por ejemplo, usa casco cuando anda en bicicleta porque las lesiones cerebrales repetidas o graves por accidentes o caídas aumentan el riesgo de demencia en la vejez.