En una decisión histórica, el gobierno de México entregó este jueves a 29 narcotraficantes de alto perfil a las autoridades de Estados Unidos, incluyendo a Rafael Caro Quintero, conocido como el Narco de Narcos. Esta acción se da en un contexto de creciente presión desde Washington, donde el presidente Donald Trump había advertido sobre la imposición de aranceles del 25% a productos mexicanos si no se intensificaba la lucha contra el crimen organizado.
Entre los delincuentes enviados a EE.UU. figuran Antonio Oseguera Cervantes, hermano de El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como Miguel Ángel y Óscar Omar Treviño Morales, exdirigentes del cártel de Los Zetas. Con estas extradiciones, México busca fortalecer la colaboración en materia de seguridad con el país vecino y atacar las redes de narcotráfico que operan en ambas naciones.
A sus 72 años, Caro Quintero ha sido trasladado a Nueva York, donde comparecerá ante una corte federal de Brooklyn por delitos relacionados con el tráfico de drogas y el asesinato en 1985 del agente de la DEA Enrique «Kiki» Camarena. Su arresto y extradición representan un paso clave en la cooperación binacional para desmantelar a los grandes capos del narcotráfico.
El fiscal general de México, Alejandro Gertz, aseguró que la decisión de extraditar a estos criminales responde a solicitudes formales de Washington y se llevó a cabo con base en las leyes de seguridad nacional del país. Con esta medida, el gobierno busca mantener la estabilidad y demostrar su compromiso en la lucha contra el crimen organizado.