Seis soldados ucranianos que se rindieron voluntariamente cerca de la ciudad de Kurájovo, en la República Popular de Donetsk, han explicado las razones de su decisión.
Los seis militares, que pertenecían a la 46ª brigada aerotransportada de tropas ucranianas, fueron abandonados por su mando sin comida y asistencia médica, según afirmaron.
“Hace dos semanas me hirieron en una pierna con metralla. Todos los días pedí que me sacaran de allí, y me respondían: “lo planificamos, lo planificamos”, pero no pudieron evacuarme. Lo prometieron todos los días, y ahora, como podéis ver, he sido capturado por los rusos”, señaló uno de ellos identificado como Alexánder Moguilni. “Ellos me vendaron, me alimentaron y me pusieron una inyección de antibióticos”, detalló un soldado.
Alexander Indiuk, otro prisionero, aclaró que decidió entregarse luego de que el comando lo abandonara a su suerte. Estuvo acostado durante diez días con un brazo roto. Nadie lo evacuó y nadie lo ayudó.
“Nos envían a ser masacrados todos los días, así que es nuestro derecho de rendirnos”, argumenta.