* Peleen por una patria equitativa: Samuel Aguirre
Por Carmen Guevara
La bandera de fuego ondeó en lo alto del escenario, mientras que la alegría de la juventud, rebosante y enmarcada en la sonrisa, acompañaba la cadencia de los jóvenes artistas que, al ritmo de la marimba, cautivaban a su público con uno de los más bellos bailes del folclor mexicano: los del estado de Chiapas.
Rostros arrebolados que resaltan la belleza de la mujer huitzilteca, caballeros erguidos con sombrero en mano, ovacionando el inicio del son; bandera de fuego, bandera roja que, empuñada en lo alto, ondea libre y victoriosa, como el pueblo de Huitzilan de Serdán. Es la generación “50 años de Antorcha, somos futuro y esta es nuestra bandera”, del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTa) 168 extensión Huitzilan de Serdán, son los egresados quienes, a través de una de las bellas artes, llegaron al corazón de sus padres y asistentes, para mostrar el trabajo de Antorcha en las aulas y la importancia de la cultura en su formación académica.
“Juventud, eleva el ideal hecho bandera: una patria más justa, más equitativa donde pueblo trabajador salga victorioso”, fue el llamado del dirigente del Movimiento Antorchista en el estado de Veracruz, Samuel Aguirre Ochoa, para que, como profesionistas, encabecen a los obreros y campesinos en su lucha por su emancipación, por la liberación de las cadenas de la explotación, para crear una gran fuerza social que permita construir una nación diferente a la que tenemos el día de hoy, donde la riqueza se distribuya de manera más equitativa.
“Hay que cambiar la situación de injusticia, por eso una de nuestras banderas es la construcción de un México más justo, en el cual la riqueza se distribuya de manera más equitativa. Que todos tengamos para alimentar a nuestra familia, una vivienda digna, donde todos tengamos trabajo bien pagado para poder trabajar y vivir en paz. Construir una nación mejor es una de las banderas de Antorcha “y ustedes la deben abrazar”.
La educación, motor de desarrollo
En uno de los espacios más representativos del pueblo huitzilteco, el auditorio “Máximo de la Cruz Rivera”, se llevó a cabo la ceremonia de graduación de la generación “50 años de Antorcha, somos futuro y esta es nuestra bandera” del CBTa 168 extensión Huitzilan, de la Secundaria Técnica No. 100 y su extensión en la Sección Segunda, así como de la Escuela Normal Mixteca Baja extensión Huitzilan.
Como padrino de generación, Samuel Aguirre destacó que la clave para que un país se desarrolle es la educación; para deje de ser una nación subdesarrollada y se convierta en un país potente, es la educación de sus ciudadanos; de ahí la importancia de hacerse de los conocimientos, de la cultura que el hombre ha adquirido a lo largo de los años; de conocer las leyes que rigen a la naturaleza, a la sociedad y el pensamiento.
“Necesitamos salir de ese atraso, pero no lo vamos a lograr si no nos esforzamos, si no estudiamos, si no nos preparamos. Mi llamado es a que estudien, para que el día de mañana lo huitziltecos tengan a buenos arquitectos, buenos médicos, tengan hombres y mujeres preparados que trabajen juntos con los campesinos y habitantes del municipio para seguir impulsando el desarrollo de México y en Huitzilan de Serdán”, expresó.
Nuestra bandera, enfatizó, es trabajar y luchar por la construcción de un México más justo; para ello, no es solo importante convertirse en grandes sabios, en científicos, sino en hombres y mujeres preocupados, que pongan en el centro de atención al pueblo trabajador y no se pongan la producción en el sentido en que se pone hoy: en el sentido de la máxima ganancia.
“Hoy se produce mucho en el mundo, pero para que unos cuantos se enriquezcan, lo que se debe hacer es producir para que todos tengamos lo indispensable para alimentarnos, para cuidar a nuestros hijos y para tener una vivienda digna”.
Huitzilan, ejemplo de desarrollo
Huitzilan de Serdán es un semillero de talento que, gracias al trabajo impulsado por el Proyecto Educativo de Antorcha Magisterial, que busca no solo el desarrollo académico, potenció las cualidades artísticas de los egresados. Así, como el bello canto del colibrí, los jóvenes cantaron, declamaron y, también, colorearon la tarde con folclor de Campeche y su “Fiesta del Palmar”.
En 1987, dijo en su intervención el líder de los veracruzanos, tuvo la oportunidad de conocer Huitzilan de Serdán y ser testigo del municipio que dejó atraso y la marginación a la que lo llevó el cacicazgo y la Unión Campesina Independiente. Y para lograr cambiar la situación, para transformarlo en un municipio de desarrollo, donde hay paz y tranquilidad, tuvo un grupo de hombres valientes que se organizaron, primero en una cooperativa y después en el Movimiento Antorchista, y lucharon por la paz.
“A través de la organización, lograron la conquista del poder municipal en 1984, llegó a la presidencia un indígena, Ramírez Velázquez Gobierno, y otros hombres que lo han secundado al frente de la administración municipal. Si las cosas han cambiado es porque la gente se organizó”, señaló.
Por ello, reconoció a los héroes que trabajaron y lucharon para el progreso de Huitzilan, hombres y mujeres de carne y hueso, con nombre y apellido, que aún están vivos y otros que ya se adelantaron en el camino. No obstante, refirió que es necesario que los huitziltecos recuerden su historia.
“Los gobiernos y los ricos de hoy quieren desaparecer la historia de las escuelas, porque saber historia nos permite analizar el pasado, para entender el presente; analizar el pasado, para darnos cuenta de los aciertos, para descubrir nuestros errores y no volver a caer en ellos, para profundizar en los aciertos. Jóvenes, conozcan la historia de Huitzilan, el progreso de su pueblo no fue gratuito, costó mucho esfuerzo de los huitziltecos”, explicó.
Reiteró en la necesidad de que los jóvenes no se confundan y estudien el pasado de Huitzilan, para que vean su historia y se compenetren en las cosas buenas que se han hecho y no se dejen engañar.
Además, llamó a los jóvenes a luchar por una educación de calidad, para que el “día de mañana que sean profesionistas, se conviertan en líderes revolucionarios que se pongan al frente de los campesinos y los obreros, porque son los campesinos y los obreros los que crean la riqueza de la sociedad, los verdaderamente importantes. El motor de la sociedad son los campesinos, porque sin ellos no se produce lo que se requiere para comer, y sin los obreros no se mueven las fábricas, no se produciría nada”.
Finalmente, dio a conocer que el imperialismo y sus aliados los países europeos están a punto de desatar la tercera guerra mundial, y con la intención de extraer más ganancia están impulsando nuevas guerras como el genocidio que están apoyando en Palestina; de ahí la importancia de también encabezar la bandera por la lucha de un mundo multipolar, y no unipolar, donde se puedan unir los países, se puedan desarrollar de manera armónica y cooperar, sin que sean sometidos por el imperialismo.