Al menos 109 personas que esperaban ayuda alimentaria murieron y 760 resultaron heridas tras recibir disparos de las fuerzas israelíes en la Franja de Gaza el jueves, reportó el Ministerio de Salud de Gaza, citado por Al Jazeera.
Según contó Al Jazeera, los ciudadanos se habían congregado cerca de la rotonda de Al Nabulsi, en Gaza, para aguardar camiones de ayuda con harina, pero fueron atacados por el Ejército hebreo.
Después de abrir fuego, los tanques israelíes avanzaron y atropellaron a muchos de los cadáveres y heridos, precisa Al Jazeera. “Es una masacre, además de la hambruna que amenaza a los ciudadanos en Gaza”, afirmó el medio.
El medio verificó imágenes que mostraban los cuerpos de decenas de palestinos muertos y heridos siendo transportados a hospitales en camiones, mientras las ambulancias no podían llegar a la zona porque las carreteras estaban “totalmente destruidas”. El Ministerio de Salud afirmó que decenas de heridos se encuentran en estado grave y crítico.
Según Al Jazeera, algunos de los muertos y heridos tuvieron que ser transportados en carros tirados por burros, mientras que otros permanecieron en las calles durante horas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Palestina condenó la “atroz masacre” y pidió un alto el fuego inmediato “como única forma de proteger a los civiles”, calificándola de “parte integral de la guerra de exterminio masivo” de los palestinos por parte de Tel Aviv.
“El Gobierno israelí no presta atención a los llamamientos y demandas internacionales para la protección de civiles” y ejerce “la brutal política de desplazamiento forzoso de nuestra gente”, argumentó el ministerio.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel afirmaron que las personas resultaron heridas “como resultado de empujones y pisotones” al rodear los camiones y por “saquear” los suministros que se entregaban.
Al mismo tiempo, una fuente militar informó a The Times of Israel que parte de la multitud comenzó a avanzar hacia las fuerzas israelíes – que coordinaban la entrada de los vehículos de ayuda – de una manera que “puso en peligro” a las tropas que abrieron fuego contra la gente.