La Suprema Corte de Justicia de México despenalizó este lunes el uso lúdico de la marihuana para adultos, al declarar inconstitucionales artículos de la ley de salud que lo prohibían, anunció el tribunal.
«Hoy es un día histórico para las libertades. Después de un largo camino, esta Suprema Corte consolida el derecho al libre desarrollo de la personalidad para el uso lúdico, recreativo de la marihuana«, dijo el presidente de la corte, Arturo Zaldívar, luego de que la decisión fuera aprobada por ocho de los 11 magistrados.
Esta declaratoria implica que quienes quieran usar marihuana con fines recreativos pueden solicitar un permiso a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), y que este no se los puede negar.
«Lo que había pasado en anteriores ocasiones era que la Cofepris negaba esos permisos y se tenía que tramitar un amparo«, explicó a la AFP Adriana Muro, directora de la organización de Derechos Humanos Elementa. Ahora «ya no se tiene que tramitar, automáticamente ese permiso se tiene que dar«, añadió.
El fallo se produjo luego de que el pasado 30 de abril venciera el plazo que el máximo tribunal había otorgado al Congreso para que emitiera una legislación al respecto.
El 10 de marzo, la Cámara de Diputados había aprobado un proyecto de ley en ese sentido. Faltaba una votación en el Senado, que ya había avalado el texto en noviembre, pero que debía retomarlo tras varios cambios en la Cámara Baja.
Sin embargo, a inicios de abril, la mayoría oficialista en el Senado dijo que analizaba aplazar hasta septiembre la discusión definitiva.
Ricardo Monreal, coordinador de la bancada del partido de gobierno, Morena, dijo entonces que la normativa que había enviado la Cámara de Diputados tenía inconsistencias.
Aunque organizaciones civiles y especialistas aplaudieron la decisión de la Suprema Corte, alertaron que aún falta que el Congreso regule la materia.
«Aún persisten la penalización hacia usuarios de cannabis, toda vez que la decisión no afecta al sistema penal y deja un vacío legal con respecto al consumo, cultivo y distribución» de la planta, expresó en Twitter la oenegé México Unido contra la Delincuencia.
Por su parte, Jorge Hernández Tinajero, activista por la regulación del cannabis en México desde la década de los noventa, señaló que el poder Legislativo ha sido incapaz de «normar la realidad», como es la posesión y comercialización de marihuana.
«Siguen manteniendo las normas secundarias que criminalizan«, declaró a la AFP.
Pese a ello, la decisión es un hito para México, de 126 millones de habitantes, que se ha visto sumido en una espiral violenta desde 2006, cuando el entonces gobierno federal lanzó un polémico operativo militar contra los poderosos carteles del narcotráfico.
Desde entonces, el país acumula más de 300.000 asesinatos, la mayoría de ellos atribuida al crimen organizado, por lo que legisladores y activistas consideran que la legalización del consumo puede ayudar a frenar el baño de sangre.
Impulsores de la despenalización, como el Grupo Promotor de la Industria del Cannabis (GPIC), consideran que las recientes medidas legales perfilan a México como el mayor mercado del mundo, por encima de Estados Unidos y Canadá.
Solo en 2020 fueron decomisadas en el país 244 toneladas de marihuana.
La más reciente encuesta nacional sobre drogas (2016) arrojó que 7,3 millones de mexicanos entre 12 y 65 años probaron marihuana alguna vez y 1,82 millones mostraron prevalencia de consumo.