La alta contaminación en el estado de Puebla ha encendido las alarmas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), quien detalló que el 80% de sus ríos, arroyos, lagos, lagunas, presas y cuencas hidrológicas no cumplen con las normas de sanidad.
En el país, la Conagua llevó a cabo un monitorero en un total de 4 mil 233 sitios superficiales, de los cuales, 73 se encuentran en el territorio poblano y la gran mayoría incumplen con la norma al presentar Demanda Bioquímica de Oxígeno (DBO5), Demanda Química de Oxígeno (DQO), y Toxicidad y/o Enterococos.
Esto significa que el semáforo de alerta de contaminación se encuentra en color rojo por “fuerte contaminación” y “contaminación” provocada por la presencia de altas concentraciones de metales pesados y químicos tóxicos, como metanol, benceno, tolueno, etilbenceno y xileno, entre otros, además de materia fecal humana.
La información se desprende del estudio “Calidad del Agua Superficial”, dado a conocer por la Red Nacional de Medición de la Calidad del Agua (Renameca), la cual precisó al corte de octubre de 2022 que, de los 73 sitios monitoreados en el estado, 58 se encuentra en color rojo; ocho en amarillo y siete en verde.
El semáforo de alerta sobre la contaminación del recurso hídrico cuenta con tres colores: verde (límites aceptables), amarillo (incumplimiento a los parámetros) y rojo (fuerte contaminación).
Para el análisis de la calidad del agua se consideraron ocho indicadores: Demanda Bioquímica de Oxígeno a cinco días (DBO5), Demanda Química de Oxígeno (DQO), Sólidos Suspendidos Totales (SST), Coliformes Fecales (CF), Escherichia coli, (E-COLI), Enterococos (E), Porcentaje de Saturación de Oxigeno (OD%) y Toxicidad (TOX).
En la revisión del documento, el organismo federal advirtió que la “fuerte contaminación” ha acelerado el estrés hídrico en la zona metropolitana de la Angelópolis, con la presencia de serios problemas de escasez del suministro del agua en el 1.7 millones de hogares poblanos que cuentan con una toma.
De la vigilancia de cuerpos de agua alertó que la ciudad de Puebla, San Martín Texmelucan, Cholula, Tecamachalco e Izúcar de Matamoros son los municipios con mayor población que presentaron contaminación e inconvenientes en el abastecimiento del líquido.
Lo anterior, como resultado del incremento sin planeación de su población, la veda de los mantos acuíferos y el recurso hídrico que se destina para el riego agrícola.
Los ríos más contaminados son: Atoyac, Alseseca, Nexapa y Rabanillo, así como el distrito de riego de Esperanza, Palmar de Bravo y San Andrés Chalchicomula.
En contraparte, informó que las presas de Tenango, Manuel Ávila Camacho I, Necaxa I y Necaxa II –ubicados en la Sierra Norte- es la región con mejor calidad del agua en la entidad.
Como resultado de la vigilancia, la Conagua determinó que la cuenca con peor calidad de agua superficial es la de Aguas del Valle de México, que contempla la Ciudad de México en forma total y parcialmente en los estados de México, Hidalgo, Tlaxcala y Puebla, donde el 30.6 por ciento está “contaminada” y el 5.4 por ciento “fuertemente contaminada”.
En tanto, refirió que la Cuenca del Balsas -que igualmente incluye a Puebla -ocupó el primer lugar de contaminación por sólidos suspendidos totales, que tiene su origen en las aguas residuales y erosión del suelo.