“Yo no trato con rajones y menos con gente que piensa que presionar”, fueron las palabras del gobernador Miguel Barbosa Huerta, durante su rutinaria rueda de prensa para los maestros de la sección 51 del SNTE que exigen su aumento salarial.
La furia del mandatario en contra del magisterio poblano se desató ante los abucheos que recibió por los docentes que se manifestaron durante un evento de “entrega de obras” en la que se encontraba el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los maestros asistieron a dicho evento realizado este fin de semana en Ayoxuxtla, con el objetivo de manifestar su inconformidad sobre el pago retroactivo del aumento salarial que no les ha brindado el gobierno de Puebla.
De acuerdo con Barbosa Huerta, llamó «rajones» a las y los docentes por no esperar el tiempo que se les indicó un día antes, pues ya habían firmado un acuerdo que establecía que hasta el 22 de noviembre se definiría la fecha en que recibirán el pago.
“A este gobierno no se le presiona con gritos, si el propósito era hacer quedar mal al gobernador con el presidente de la república, el presidente de la república y el gobernador Miguel Barbosa tienen más de 20 años de conocerse y de tratarse”, declaró el mandatario.
Acusó que la protesta fue propiciada por el delegado de Programas para el Bienestar del gobierno federal, Rodrigo Abdala Dartigues, pues dijo que permitió que los docentes ingresarán al evento en vez de evitarlo.
«El delegado de Bienestar, cuyo nombre no quiero repetir, destila frustración, amargura, envidia… y bueno, hoy ha habido la oportunidad de que maestros los metieran al evento para gritar, en lugar de evitarlo, lo permitió, lo propició», reprochó.
Barbosa Huerta deslegitimó las protestas docentes y las calificó de «grillas», pues señaló que está en proceso de renovación la dirigencia de la Sección 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), por lo cual los maestros están compitiendo entre ellos y asumen que ganará «quien haga más ruido».
