La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2021, elaborada por el INEGI, ofrece datos reveladores y que deberían ser motivo de protesta.
Resalta, pues, que en Puebla, apenas el 19.8 por ciento de los infantes cuentan con un cuadro básico de vacunación completo. ¿Por qué? La respuesta es muy sencilla: el gobierno federal no manda vacunas a los estados.
Así, en Puebla apenas 2 de cada diez menores de un año de edad tiene completo el esquema de vacunación; a nivel nacional, en promedio solo el 27.5 por ciento lo tiene.
Hace 10 años, esto es, en el 2021, el 74.2 por ciento de los menores de 12 a 35 meses de edad tenían todas sus vacunas.
Hace unos días, confirmó el secretario de Salud, José Antonio Martínez García, que el estado de Puebla se registra desabasto de vacunas del cuadro básico; el funcionario argumentó que la situación tiene como origen falta de producción de los biológicos.
Sin embargo, el sector privado afirma lo contrario. No faltan vacunas, las hay. Lo que falta es la acción del gobierno mexicano, que deja indefensos a los hombres y mujeres del mañana con su austeridad y su pobreza franciscana.
