Puebla, Puebla. La mañana de este viernes, dos grupos de manifestantes se dieron cita frente al Congreso Estatal, para exigir solución a sus demandas, uniendo fuerzas para obtener una respuesta por parte de los funcionarios.
Se trató de la Colectiva de Amorosas Madres Contra la Violencia Vicaria (Cam-Cai), quienes pidieron se avance con la ley que penalice este tipo de violencia y del grupo de atlixquenses usuarios del agua, quienes exigieron no aprobar el aumento a las tarifas del agua potable.
Madres piden justicia
En este sentido, las colectivas hicieron un llamado a las autoridades a escucharlas y no hacerlas de lado, pues dijeron que la violencia vicaria debe castigarse ya que es una problemática que se vive diariamente en los hogares poblanos, y al fin y al cabo, los principales afectados terminan siendo los pequeños.
“La violencia vicaria es un acto que no se debe permitir en las familias. Quienes hacen esto piensan que nos afectan a nosotras, y lamentablemente si lo hacen, porque todo lo referente a nuestros hijos nos duele, pero no se dan cuenta que los más afectados son los niños, al no tener una estabilidad familiar como debería ser” dijo una de las manifestantes.
Pidieron que se legisle a favor del reconocimiento de esta ley para que pueda ser tipificada en los diferentes códigos de justicia.
Atlixquenses exigen cobros justos de agua potable
El segundo grupo presente en la manifestación fueron los vecinos atlixquenses, quienes volvieron a hacer presencia para pedir que se respeten sus derechos y no se hagan injusticias.
Denunciaron que el Sistema Operador del Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (SOAPAP) ha realizado una serie de injusticias al cobrarles una suma extremadamente elevada en el servicio, cuyas cifras van desde los 20, hasta los 170 mil pesos.
Es así, que pidieron al congreso una solución ante esta problemática, pues señalaron que al ser personas de bajos recursos, les es imposible pagar el total que se les cobra. Al mismo tiempo, solicitaron a los legisladores no aprobar el aumento al servicio, ya que la situación de los poblanos no les permitirá adaptarse a este cambio.
Luego de que ambas manifestaciones se encontraran frente al congreso poblano, optaron por unir fuerzas y, pese a que las exigencias eran distintas, unieron voces para gritar las consignas de ambos grupos.
