Por Silvanna Mortera
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI) y del Instituto Nacional de Migración (INM), el flujo migratorio en Puebla va en aumento, pues en los tres primeros meses de 2022 ya suman mil 390 los migrantes que han sido rescatados en distintos puntos de la entidad.
De acuerdo con la Comisión de Derechos Humanos (CDH), durante su travesía los derechos humanos de los migrantes son vulnerados pues viajan en condiciones inhumanas y se enfrentan a la inseguridad, ya que también son víctimas de robos y otro tipo de delitos. La CDH registró 13 denuncias en 2020; en 2021, 18, y en el primer trimestre de 2022 ya cuenta con cinco. Entre las quejas más comunes destacan el abuso de autoridad de los elementos de migración, que no se brindan protección, que no se resuelve la situación jurídica migratoria y que no se otorga asesoría e información sobre el desarrollo de los procedimientos para la deportación.
La “ruta del migrante” se ubica en los municipios de Tepeaca, Acajete y Tecamachalco, así como en la autopista México-Puebla. Ahí es donde se tiene registrada una mayor incidencia de tráfico de personas.
En lo que va del 2022, autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) han localizado y rescatado a mil 390 migrantes en el estado de Puebla. De acuerdo con información publicada por la dependencia de la Secretaría de Gobernación (Segob) federal, más de 10 grupos de migrantes fueron identificados en distintos municipios de la entidad durante los últimos cuatro meses.
Uno de los casos más recientes fue el del 27 de abril, cuando el INM rescató 379 migrantes en la localidad San Antonio Tlacamilco, de la junta auxiliar La Magdalena Tetela, en Acajete: 286 de nacionalidad guatemalteca; 17, ecuatoriana; ocho, cubana; 12, hondureña; tres, nicaragüense; y siete salvadoreña; tres de República Dominicana; 22 de Bangladésh; una de Nepal; una de Sri Lanka; 2 de Uzbekistán y 17 de la India.
Además, fueron detenidos cuatro mexicanos por el probable delito de tráfico de personas. Se trató de la segunda cifra más alta de migrantes rescatados en por lo menos los últimos tres años.
La segunda cifra más alta se tuvo cuando el 23 de abril sobre la autopista Puebla-Orizaba fueron detenidos 330 migrantes: 18 cubanos, 14 ecuatorianos, 55 salvadoreños, 44 nicaragüenses, 36 guatemaltecos y 73 hondureños que viajaban en 11 camionetas y dos automóviles particulares.
El 16 de febrero se identificaron a 120 centroamericanos de distintas nacionalidades, quienes viajaban en un autobús del giro turístico. Algo similar ocurrió en los límites de Tepeaca y Nopalucan el 13 de marzo, donde 40 migrantes de Guatemala, El Salvador y Honduras fueron rescatados cuando se transportaban en camionetas particulares.
De las personas extranjeras que han sido localizadas y aseguradas durante los meses de enero, febrero, marzo y abril, la mayoría corresponde a migrantes provenientes de Guatemala.
Según el registro del INM en Puebla, previo a la detención de los 379 migrantes en territorio poblano, sumaban 314 migrantes guatemaltecos, de los cuales 16 corresponden a menores de edad; 143 de Honduras; 59 de Cuba; 60 de Nicaragua; 70 de El Salvador; cuatro de Venezuela y 15 de Ecuador.
De acuerdo con el protocolo establecido por el INM, los migrantes son trasladados a oficinas de la dependencia para iniciar los procedimientos que definan su situación jurídica en México.
Lamentablemente los países de los que generalmente buscan huir los ciudadanos carecen de legitimidad democrática y cuentan con una represión inhumana a su población.
La única solución al origen de esta crisis y, en general, del fenómeno migratorio, es el desarrollo humano sostenible en los países de origen. Los gobiernos deben crear las condiciones óptimas para que la ciudadanía cuente con trabajo bien remunerados y no tenga la necesidad buscar en otro país las condiciones sociales necesarias para sacar adelante a sus familias.
Hasta la llegada de López Obrador, México participaba como país de tránsito, sin embargo, tras las presiones de Biden, México es ahora el gendarme de la política exterior. En la primera mitad del gobierno de la 4T van 2 mil 823 asesinatos de migrantes en estados del sur de México.
Los migrantes son víctimas de desapariciones, ejecuciones, extorsiones, o accidentes que sólo se conocen cuando son noticia por la gran cantidad de decesos, como el del 9 de diciembre en Chiapas cuando murieron 56 migrantes, que iban ocultos en un camión que circulaba a exceso de velocidad y en el que viajaban hacinados más de cien centroamericanos. O como el del pasado 27 de junio, en Texas, con la pérdida de más de 53 migrantes.
