La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) urge a los Estados para que desarrollen prácticas y políticas que reduzcan los riesgos que muchas personas en movilidad deben enfrentar durante sus travesías migratorias. A nivel mundial se han registrado más de 45 mil 400 muertes desde 2014 y este año se han registrado 4 mil 236 decesos incluyendo el accidente sufrido por migrantes en Chiapas donde murieron 54 personas y superando el número de muertes que se presentaron el año pasado.
Decenas de estados se han comprometido con el Pacto Mundial sobre Migración, pero tan sólo unos pocos se han comprometido específicamente con el Objetivo 8 relacionado con la tarea de salvar vidas y establecer esfuerzos internacionales coordinados en beneficio de los migrantes desaparecidos.
En las Américas, este año se registraron 1 mil 121 fallecimientos; en las rutas migratorias hacia y dentro de Europa, las 2 mil 720 muertes ocurridas hacen que este año haya sido el más fatal en la región desde 2018. Hasta el momento el cruce central del Mediterráneo se llevó al menos unas 1 mil 315 vidas humanas este año. Por lo menos 937 personas perecieron en la ruta del Atlántico rumbo a las Islas Canarias; la frontera terrestre entre Turquía y Grecia también ha sido testigo de un aumento de los fallecimientos en 2021, con al menos 41 vidas perdidas, más que en cualquier otro año sin incluir el 2018, año en el que se registraron 59.
En el Tapón del Darién, zona selvática remota entre Panamá y Colombia, se perdieron 42 vidas, En los cruces entre el Cuerno de África y Yemen, al menos unas 98 muertes en comparación con las registradas en 2020.