Ante el reciente feminicidio de una menor de cuatro años de edad, en la comunidad de Ocotitlán, municipio de Chichiquila, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta cuestionó que la niña debió estar más vigilada por su familia para no ser víctima de esta tragedia.
“¿Puedo decir que alguien pudo haber evitado este hecho? Pues probablemente sí, pero tampoco tengo conocimiento de en qué condiciones se dio. Que la niña debió de haber estado más cuidada por los mayores, sus padres, familiares, por la misma gente que está ahí, alrededor de su casa, probablemente sí”, fueron las palabras de Barbosa Huerta ante el feminicidio.
En rueda de prensa, el mandatario cubrió la ola de inseguridad que atraviesa el estado, debido a sus nulas acciones, asegurando que en algunos municipios alejados hay comportamientos “deteriorados” en condiciones legales de protección, a las infancias.
“Pero por lo que respecta a un sistema de protección legal, hay todo el andamiaje legal para que esto ocurra”, agregó.
De acuerdo con la información oficial, la menor de nombre Brenda se encontraba de visita en casa de su abuela en el municipio de Chichiquila; pidió dinero para comprar un dulce, salió de la casa y ya no regresó. Fue así que tras un rato sin volver, sus padres la buscaron durante horas en las calles aledañas, hasta que fue encontrada sin vida con señales de tortura y abuso sexual.
Desafortunadamente en Puebla, la violencia en contra de menores de edad se está normalizando por parte de las autoridades, pues esta no es la primera declaración desafortunada del ejecutivo local, pues a principios de junio se refirió a un caso de bullying en su entidad como “un tirito entre estudiantes” y señaló: “Eso no es bullying, es lo propio de la convivencia, eso siempre ha existido, nada más que ahora hay teléfonos y todo se graba”.
El caso más reciente que demuestra que el estado cuenta con un gobernador sin ánimo, para la protección de la niñez, fue durante la vacunación a menores en el norte de la capital, donde un sujeto identificado por vecinos como El Cholo, disparó contra un adulto hiriendo a dos menores de edad que aguardaban por el biológico.
Rápidamente, lo adjudicaron a una disputa entre presuntas bandas delictivas que se pelean la zona.
