El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó este lunes que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN no resultará en medidas de respuesta por parte de Moscú si esta no incluye una expansión de la infraestructura militar del bloque en sus territorios aseguró Putin durante una cumbre con los líderes de los países miembros de Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
La cumbre celebrada este lunes en Moscú participaron el presidente de Rusia, Vladímir Putin; el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián; el presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko; el presidente de Kazajistán, Kasim-Yomart Tokáev; el presidente de Kirguistán, Sadyr Zhaparov; el presidente de Tayikistán, Emomali Rahmon, y el secretario general de la OTSC, Stanislav Zas; sesión que estuvo dedicada al 30º aniversario de la firma del Tratado de Seguridad Colectiva (el 15 de mayo de 1992) y al 20º aniversario de la creación de la Organización (el 7 de octubre de 2002).
El presidente ruso dijo que “en cuanto a la ampliación de la Alianza del Tratado del Atlántico Norte, si es un problema que se crea de forma bastante artificial porque se hace en función de los intereses de la política exterior de Estados Unidos. En general, dijo, la OTAN se está utilizando como una herramienta de política exterior de un país en esencia. Bueno, se hace con bastante persistencia, habilidad y agresividad. Todo ello agrava el ya difícil entorno en materia de seguridad internacional”.
Vladímir Putin se refirió a la ampliación incluso a través de los nuevos mientras de la Alianza Finlandia, Suecia e informó a sus colegas que “Rusia, no tiene ningún problema con estos Estados. No, en ese sentido, no hay una amenaza inmediata para nosotros. La expansión realizada por estos países no crea amenazas para Rusia; sin embargo, una expansión de la infraestructura militar en este territorio provocará sin duda, nuestra respuesta y determinaremos que tipo de respuesta será, en función de las amenazas que nos crean, es decir, los problemas se crean de la nada”.
Además, explicó que de esta interminable política de expansión la OTAN está yendo más allá de sus competencias geográficas, más allá de las zonas euroatlánticas, tratando de involucrarse cada vez más activamente en cuestiones internacionales y de controlar la situación de la seguridad internacional e influir en ella en otras regiones del mundo, no de la mejor manera, lo que señaló que requerirá sin duda, una atención adicional.