Antonio Escamilla
El periodismo es, según la Real Academia de la lengua española, la actividad profesional que consiste en la obtención, tratamiento, interpretación y difusión de informaciones a través de cualquier medio escrito, oral, visual o gráfico. Además, puede decirse que, desde el punto de vista de la teoría del conocimiento, el periodismo es un reflejo fiel de la realidad objetiva, expresado en sus diferentes formas y sujeto a ciertas normas éticas y sociales.
Así, el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos dice: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. El Código Internacional de Ética Periodística planteado por la UNESCO, Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura que tiene, entre otros, el mandato de defender la libertad de expresión y la libertad de prensa, plantea que el periodismo es: 1. El derecho del pueblo a una información verídica; 2. Adhesión del periodista a la realidad objetiva; 3. La responsabilidad social del periodista, ante la diversidad de intereses sociales; 4. La integridad profesional del periodista; 5. Acceso y participación del público; 6. Respeto de la vida privada y de la dignidad del hombre; 7. Respeto del interés público; 8. Respeto de los valores universales y la diversidad de las culturas; 9. La eliminación de la apología de la guerra y otras grandes plagas a las que la humanidad está confrontada.
Pero desde que el periodismo surgió en la historia de la humanidad, cuando ya la sociedad se había dividido en clases sociales antagónicas, cuando las clases dueñas de los medios de producción se dieron cuenta de la importancia y eficacia de la comunicación social a través de la prensa escrita, para divulgar su ideología y usarla de vía de sometimiento para dominar a las grandes masas de explotados, así como en una sociedad de clases existe una determinada relación de poder entre los individuos, en esa misma sociedad habrá también un periodismo que refleje esas relaciones de subordinación de una clase social por otra; el periodismo, debido a su función legitimadora, se convierte por pura necesidad en instrumento imprescindible para mantener el orden jerárquicamente establecido. El periodismo, salvo muy honrosas y contadas excepciones, es legitimador de las ideas de la clase dominante, lo que no podía ser de otra manera, pues quien tiene en sus manos el control de las fuerzas productivas en la economía, también dispone de los medios de producción intelectual, entre los que se encuentra el periodismo.
Sin embargo, conforme es la propia realidad en movimiento la que, a final de cuentas, llena la conciencia de la sociedad y ésta evoluciona, se transforma, cambia, surgen en el mundo, en México y en Puebla expresiones de periodismo distintas, objetivas sí, pero al mismo tiempo revolucionarias que, por un lado, tienen la tarea de cumplir con una misión esencialmente informativa-cognoscitiva; estas expresiones de información y comunicación dan a conocer la realidad social para la audiencia, a la que influyen y con la que entablan una especial relación de confianza, dada la objetividad, la veracidad con la que se desenvuelven; por otro, también tienen la misión de ser expresiones intelectualmente formativas, formadoras u orientadoras de conciencias; estas expresiones innovadoras, influyen ya en los miembros de la sociedad, los educan políticamente y los hacen partícipes de ellos. Los periodistas que trabajan en estas expresiones son investigadores y sociólogos que analizan el estado de las cosas, que acercan los hechos a los receptores, que comparan, elaboran y generalizan los acontecimientos expresándolos en conceptos, conclusiones y propuestas alternativas para la transformación de la realidad social tan injusta y tan inhumana como la que vivimos hoy en día. Expresiones de periodismo que revaloran el papel tan importante que juegan las masas trabajadoras en la sociedad tanto en su base actual como en su ulterior revolución, y que por eso hablan de sus problemas, necesidades y anhelos y les dan voz cuando se requiere.
Pues bien, con seguridad digo que la página web, contigopuebla.mx, se ubica dentro de estas expresiones de periodismo revolucionario y comprometido con la verdad, que da voz también, a los débiles y desamparados de siempre. Por eso, en vísperas de su aniversario, mando un saludo fraterno y mis más sinceras felicitaciones a todos los que hacen posible la existencia de este importante y prestigiado medio de comunicación, a los periodistas, editores y trabajadores y, en particular, a su directora editorial, Diana Karen Rosas, y a su director, el periodista Luis Fernando Soto Beltrán.
