*Estrategia de control de carteles en el país falla.
De acuerdo con el Balance de InSight sobre los homicidios en el 2021 registrados en cada país de América Latina, y los factores que causan el derramamiento de sangre, México experimentó —al igual que un gran número de países de la región—, un incremento de la violencia, principalmente por parte de los cárteles de la droga que se enfrentan por los territorios.
Pese a la existencia de una reducción de la violencia el año pasado —de 34, 514 en 2020 a 33, 308 en 202 (3%)—, dicho Balance revela que el país presenció una terrible violencia de carteles que, a manera de pequeños ejércitos, se enfrentaron por todo el país.
Durante el 2021 fueron registrados 26 asesinatos por cada 100,000 habitantes.
Por tales resultados, para la fundación, el país no ha logrado mantener bajo control a los grupos del crimen organizado que impulsan la violencia en el país, con seis estados (Guanajuato, Baja California, Michoacán, EDOMEX, Chihuahua y Jalisco), aportando la mitad de los asesinatos nacionales.
InSight Crime añadió que la criminalidad de México se ha vuelto cada vez más fragmentada y depredadora, lo que ha creado un clima de hiperviolencia, pues en la mayoría de los asesinatos se utilizan armas de fuego, y los grupos criminales cuentan con un flujo constante de armas de alto poder que llegan desde Estados Unidos.
Asimismo, se hizo énfasis en la alarmante tasa de asesinatos de mujeres, ello al indicar que desde el 2015, los feminicidios han incrementado en 135%, pasando de 427 a 1,004 en el 2021. Mientras que en el país se han presentado más de 900 feminicidios cada año desde el 2018, o alrededor de 75 cada mes, por lo que “no hay duda de que la violencia de género continúa siendo un problema grave en México”.