Desde la tarde del miércoles, se esparció el rumor de un supuesto motín en el Centro de Reinsersión Social de Puebla (CERESO), que prontamente fue desmentido en un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública del estado (SSP), en medio de la crisis que enfrenta el gobierno de Miguel Barbosa tras el hallazgo del cadáver de un bebé entre la basura del penal de San Miguel.
Esta madrugada, se reporta un fuerte operativo de la de la misma SSP y la Guardía Nacional, a partir de las 9 de la noche del miércoles. Los agentes de la primera corporación ingresaron al centro penitenciario, mientras los elementos restantes permanecieron en resgurado del exterior.
En un comunicado, la SSP señala que desde el cambio de las autoridades encargadas del CERESO, se implementaron operativos de seguridad para garantizar su funcionamiento. Sin embargo, otras versiones señalan que internos rechazaron a la nueva directiva y lo que inició como una protesta derivó en motín, que ya fue negado por el gobierno estatal.
Todo ocurre tras el encarcelamiento de 20 personas, entre ellos del ex encargado del penal, custodios y hasta la mujer que presuntamente introdujo el cuerpecito del bebé Tadeo, localizado el 12 de enero en un contenedor de basura al interior del centro penitenciario.