Para los que creían que esta nueva legislatura sería diferente de la pasada, que muchos sinsabores dejó en los poblanos, estos tres primeros meses dejan ver que es más de lo mismo.
¿Por qué? La respuesta es simple: El trabajo de los diputados se ha limitado a aprobar las reformas que el Gobernador Miguel Barbosa envía.
Esta casa editorial adelantaba ya desde antes de que la LXI Legislatura del Congreso de Puebla tomará protesta que la balanza estaba inclinada hacia el gobernador; aunque insistió en negarlo, tiene a mucha gente de todos los colores a su servicio en el recinto legislativo.
¿La prueba? De acuerdo con el portal del Congreso del Estado, durante estos primeros meses los legisladores han presentado 85 puntos de acuerdo que únicamente son exhortos; también han presentado 79 iniciativas con minuta de reforma a varios artículos, pero ninguna ha sido discutida y, mucho menos, aprobada.
En contraparte, desde el 13 de octubre han llegado cinco iniciativas de parte del morenista Barbosa Huerta y, ¡vaya sorpresa! Todas fueron velozmente aprobadas.
Y para nadie es un secreto el que la LX Legislatura pasada aprobó el 93 por ciento de las iniciativas del mandatario, en muchos casos sin cambios ni discusión. Hasta el momento, la LXI lleva el 100 por ciento en la tarea. ¿Será otra vez Barbosa el gran legislador?