Luego de que el INEGI reveló que la inflación en México se ubicó en 7.05 por ciento, su nivel más alto desde 2001, el precio de la tortilla en el país podría llegar hasta los 23 pesos en la zona centro, y 27 pesos en el norte, al cierre del año.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el precio de la tortilla, uno de los pilares de la alimentación en México, registro una inflación del 16.7 por ciento anual y 0.4 por ciento quincenal en la primera mitad de noviembre.
Ante estos datos, industriales señalaron que que el precio del kilo de tortilla, a finales del 2021, podría alcanzar hasta los 27 pesos en algunas regiones de las entidades federativas de la República Mexicana.
Además el presidente del Consejo Nacional de la Tortilla, Homero López García, indicó que, como cada año, prevé que la empresa Maseca, la principal distribuidora de harina, anuncie un incremento en sus costos, que aunado al precio del gas, puede repercutir en el costo final de la tortilla.
La tortilla no es el único alimento que está encareciéndose a un paso alarmante. La carne de res registró una inflación de 13.3 por ciento en la primera quincena de noviembre, su dato más alto en seis años. Para el pan de caja, el alza (10.9%) fue la más fuerte en 12 años. El índice de pescados y mariscos avanzó 10.2 por ciento, un máximo de cuatro años.
De acuerdo a datos del Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM), hasta el 5 de novimebre, el precio por el kilo de tortilla ya supera los 20 pesos en algunos estados, aunque en otros se mantiene a costos bastante accesibles que rondan entre los 13 a 14 pesos.
El precio de este alimento varía de acuerdo al estado, de hecho, con base en las cifras del SNIIM , el costo más alto es de 25.33 pesos en Hermosillo, Sonora; mientras que el más bajo es de 13 pesos en Tlaxcala y Puebla.
Lo preocupante de toda esta situación es que el impacto más significativo se reflejará en los bolsillos de la población más pobre.
