El Movimiento Al Socialismo (MAS) tiene a su abanderado a la Presidencia, luego de que dirigentes campesinos insistieran al actual mandatario, Luis Arce, para que aceptara ir por la reelección. Quien será el aspirante oficialista es el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.
A pesar de que tienen una tarea difícil por delante, la dirigencia del partido confía en que podrán triunfar en las elecciones generales del 17 de agosto.
El “plan A” del masismo era postular a Luis Arce a un segundo mandato. En las últimas semanas, el presidente fue proclamado en más de 40 poblaciones de Bolivia. Pero el apoyo que cosechó quedó en duda cuando el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, anunció que también buscaría ser candidato para encabezar el Poder Ejecutivo del país sudamericano.
El presidente del MAS, Grover García, reconoció que mantuvieron negociaciones para que el líder de la cámara alta aceptara presentarse por el oficialismo. En ese contexto, Luis Arce renunció a su deseo de volver a postularse para que Rodríguez avance en la unión del partido, dividido desde hace dos años por diferencias entre el Gobierno nacional y el expresidente de la fuerza política, Evo Morales (2006-2019).
Ante la negativa del senador de presentarse por el MAS, la dirigencia volvió a pedirle a Arce que aceptase una nueva candidatura. Pero, para el presidente, su decisión ya no tiene retorno.
Eduardo del Castillo, quien ya habría renunciado a su Ministerio para dedicarse a la campaña, fue anunciado como candidato del MAS el 16 de mayo. Lo acompañará en la fórmula para encabezar la vicepresidencia Milán Berna, exdirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), una de las organizaciones fundadoras del partido.
“Saludamos con entusiasmo y optimismo esta decisión y llamamos a las organizaciones sociales, a las fuerzas progresistas y de izquierdas, y al pueblo en general, a crear una estrategia unitaria para asegurar la continuidad del Proceso de Cambio, la existencia del Estado Plurinacional y resguardar los logros de la revolución democrática y cultural ante las amenazas de una derecha retrógrada y neoliberal”, publicó Arce en sus redes sociales.