Según un funcionario de la Casa Blanca, las tarifas a los productos chinos podrían reducirse a entre el 50% y el 65%.
La Administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sopesa reducir los aranceles impuestos a las importaciones de mercancías chinas en un intento por mitigar las tensiones con China, informa The Wall Street Journal.
De acuerdo con fuentes familiarizadas con el asunto, aunque todavía no se ha tomado una decisión final, en la Casa Blanca están considerando varias opciones para aliviar las discrepancias entre ambos países.
Un funcionario de la Administración Trump dijo que es probable que las tarifas sobre productos chinos bajen a entre el 50% y 65%. Además, se está discutiendo un enfoque más equilibrado que supone la introducción de gravámenes del 35% sobre los artículos que Estados Unidos no considera una amenaza para la seguridad nacional, y al menos del 100% para productos considerados estratégicos para los intereses del país norteamericano.
Donald Trump no descartó bajar las tarifas impuestas a mercancías chinas, pero al mismo tiempo señaló que la tasa no será del 0%. “Es cierto que el 145% es muy alto. No será tan alto”, dijo el mandatario. “Bajará considerablemente, pero no será del 0%. Antes era del 0%. Nos destruyeron. China nos ha estado engañando. Esto no va a pasar”, agregó. “Vamos a ser muy buenos con China, tenemos una gran relación con el presidente Xi Jinping”, enfatizó.
A su vez, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Guo Jiakun, subrayó este la disposición de Pekín a negociar con Estados UNidos, aunque advirtió que no lo haría bajo las constantes amenazas de la Casa Blanca.
“No queremos una guerra comercial, pero no le tememos. Si quieren luchar, también lo haremos hasta el final; si quieren hablar, la puerta está abierta”, dijo Jiakun. “Si Estados Unidos realmente quiere resolver los problemas mediante el diálogo y la negociación, debería dejar de amenazar y chantajear, y entablar un diálogo con China basado en la igualdad, el respeto mutuo y el beneficio mutuo”, aseveró.
En la actualidad, los aranceles de China a los productos de Estados Unidos son del 125%, mientras que los de Estados Unidos a China ascienden al 145%.
La Organización Mundial del Comercio calculó que la escalada de tensiones entre las dos principales economías del mundo podría reducir el comercio de bienes entre ambas naciones en un 80%.
The Wall Street Journal recalca que la disposición a un acuerdo tanto por Washington como por Pekín representa un cambio respecto a las últimas semanas, cuando los gobiernos de ambos países impusieron aranceles recíprocos e intercambiaron acusaciones de poner en peligro la estabilidad financiera mundial, que han resultado en el desencadenamiento de una guerra tarifaria.