Solo las fuerzas militares pueden “expulsar a esa inmundicia” que tiene ahora el poder en Kiev, declaró el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, durante una entrevista con el diario ruso Kommersant.
El canciller destacó el carácter rusófobo del régimen de Kiev, que llegó al poder tras el anticonstitucional golpe de Estado de 2014, “pagado” por Estados Unidos y la Unión Europea. Lavrov recordó que Victoria Nuland, quien se desempeñó como subsecretaria de Estado estadounidense a cargo de Asuntos Europeos y Euroasiáticos en el período del golpe de Estado, admitió durante las audiencias en el Senado que Washington había gastado en ello 5 mil millones de dólares y “esto dio resultados: se estableció en Ucrania un gobierno amistoso hacia nosotros”.
“Que era el poder de los nazis, eso se aclaró muy rápidamente”, declaró el ministro, indicando que “el primer instinto” de aquella autoridad fue violar los acuerdos de Minsk, que contaban con garantías por parte de Alemania y Francia. “Para entonces, ya esos procesos habían adquirido un carácter irreversible”, dijo.
“Quiero decir que solo las fuerzas militares pueden finalmente expulsar a esa inmundicia del poder”, enfatizó. “Mataron físicamente a muchas personas, incluidos periodistas, personalidades públicas que defendían la necesidad de preservar la cultura rusa en un país que fue creado en gran medida por rusos”, afirmó.
Durante la misma entrevista, Lavrov dijo que los países europeos quieren ahora preservar en Ucrania un régimen similar al actual e instalar para ello “un nuevo semiführer”. Enfatizó que “el enfoque rusófobo” está consagrado en la legislación ucraniana.
