Por Mary González
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, dejó en claro que su administración no negociará la liberación de Uruviel y Giovanni González Vieyra, presidentes municipales de Chalchicomula de Sesma y Tlachichuca.
Dijo que en su gobierno no hay cabida para acuerdos que vayan en contra del Estado de derecho y rechazó cualquier intento de presión social para revertir una decisión judicial.
“Yo ya estoy curtido y no cederé a chantajes” expresó el mandatario estatal al referirse al caso y a organizaciones que busquen amedrentarlo.
“¿Cómo se va a sentar el Gobierno a negociar con una organización para liberar a un delincuente, cuando el delincuente mató a una persona? Así se manifiesten seis años, la ley no se negocia, se aplica”, afirmó.
El mandatario recordó que el problema viene de años atrás, cuando se registró el asesinato de elementos de seguridad en los municipios que gobernaban los hermanos González Vieyra.
Explicó que de estos acontecimientos se abrió una investigación y ahora es importante conocer si los señalamientos contra los ediles están vinculados a esos casos.
Ayer, habitantes de los municipios involucrados tomaron el Congreso del Estado desde la mañana hasta pasada la medianoche, para exigir la liberación de los alcaldes.
