Las Fuerzas Armadas (FFAA) rusas destruyeron dos tanques Leopard de producción alemana y liberaron seis localidades en la república popular de Donetsk en la última semana de combates, comunican desde el Ministerio de Defensa de Rusia. En cuanto a las bajas, Kiev perdió hasta 10 mil 570 soldados en todos los frentes.
“Las unidades del grupo de tropas Centro continuaron avanzando en lo profundo de las defensas ucranianas y liberaron las localidades de Dzerzhinsk, Yasenóvoye, Vodiánoye Vtoroye y Zeliónoye Pole, de la república popular de Donetsk”, informan desde el ministerio en un parte semanal.
A su vez, el grupo Sur “mejoró sus posiciones tácticas y liberó las localidades de Oréjovo-Vasílevka y Dáchnoye”, también ubicados en la república popular de Donetsk.
De acuerdo con el ministerio, en la última semana el grupo de fuerzas ruso Centro eliminó a más de 3 mil 730 militares ucranianos y el grupo de fuerzas ruso Oeste causó más de 1 mil 480 bajas a las FFAA de Ucrania.
Mientras tanto, el grupo de fuerzas ruso Sur abatió hasta 1 mil 325 soldados ucranianos y el grupo Este más de 1 mil 5 efectivos. Asimismo, el grupo Dniéper causó más de 440 bajas a las tropas de Kiev y el grupo Norte neutralizó a más de 2 mil 590 militares.
Rusia continúa, desde el 24 de febrero de 2022, una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio por parte de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia el este.
El pasado 14 de junio, Putin formuló varias condiciones clave para iniciar las negociaciones de paz, en particular, que Ucrania retire las tropas de los cuatro nuevos territorios rusos, es decir, Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporozhie, desista de adherirse a la OTAN, mantenga el estatus neutral, no alineado y no nuclear, y que además se levanten todas las sanciones contra Rusia. Volodímir Zelenski, a su vez, rechazó la propuesta, calificándola de ultimátum.