De acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), entre enero y noviembre de 2024, fueron documentadas 2,243 muertes violentas de niños y niñas en el país. Además se contabilizaron 74 feminicidios de niñas y adolescentes.
El trágico hallazgo del cuerpo sin vida de una pequeña de tan solo 10 años de edad, que tenía un mundo por delante, paraliza. Una sociedad que no protege a sus niños, ha fracasado en muchos aspectos, porque los deja vulnerables y expuestos a la violencia, la explotación y el abuso.
Esta situación ha rebasado a las autoridades locales y nacionales, junto a sus políticas de “abrazos”, un indudable reto a superar y que deja mucho que desear a 100 días de la formación del supuesto “segundo piso de la transformación”, pues en el primero tampoco se garantizó seguridad para nadie en ningún rincón del país.
Además, este miércoles fuimos testigos de una marcha multitudinaria, por parte de los comerciantes que piden paz, justicia y seguridad en la central de abastos, pero esto no es más que el llamado de la sociedad entera que penosamente es agredida y robada un día sí y el otro también.
