Puebla podría convertirse en una de las sedes para ensamblar el primer automóvil eléctrico mexicano, Olinia, un proyecto desarrollado por el sector público y la iniciativa privada que busca revolucionar la movilidad sustentable en el país. El vehículo tendrá un costo de entre 90 y 150 mil pesos, posicionándose como una alternativa ecológica y económica.
El anuncio se realizó durante la conferencia de prensa de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien destacó la importancia de impulsar tecnologías que limpiasen el sector automotriz. Roberto Capuano, coordinador del Proyecto Olinia, confirmó que Puebla y Hermosillo están en conversaciones avanzadas para albergar las primeras plantas ensambladoras debido a su tradición y experiencia en la industria automotriz.
Capuano explicó que Olinia es un vehículo eléctrico compacto diseñado para distancias urbanas menores a 30 kilómetros y se puede cargar en cualquier enchufe convencional. Entre sus ventajas destacó su carácter cero emisiones, operación silenciosa y costos significativamente menores en comparación con los vehículos de gasolina.
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, expresó su respaldo al proyecto, asegurando que el estado cuenta con la infraestructura industrial y el capital humano necesario para albergar esta iniciativa. “Puebla tiene una larga trayectoria en la fabricación automotriz y está lista para ser pionera en la movilidad eléctrica”, afirmó.
Por su parte, Héctor Alberto Sánchez Morales, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en Puebla, subrayó que la entidad reúne todas las condiciones necesarias para recibir un proyecto de esta magnitud. “Contamos con experiencia, conectividad y un entorno empresarial favorable que posicionará a Puebla como referente en la industria de vehículos eléctricos”, comentó.