Una opción es extender su producción en Brasil o instalarse en Perú. Por su cercanía con Estados Unidos y Trump, bajan las posibilidades para México.
La empresa asiática BYD analiza instalar una nueva planta de ensamblaje en Perú o extender su producción en Brasil, luego de que la inversión se acercó a México porque los empresarios chinos pretender evitar el aumento de aranceles por parte del próximo presidente de Estados Unidos Donald Trump.
Hace semanas, por su creciente inversión desde Asia en el rubro automotriz, México era una de las principales opciones para la instalación de la planta. Ante las advertencias de Trump y la pronta revisión del T-MEC en el 2026, donde el país mexicano podría alinearse con las políticas industriales y económicas de la nación vecina, BYD ya apunta a otros horizontes.
La primera opción es expandir su inversión en Brasil, donde ya cuenta con una ensambladora en Campinas. También voltearon a ver a Perú, además de que la presidenta interina de Perú, Dina Boluarte ya entabló diálogo con los directivos.
Boluarte visitó la planta de BYD en la ciudad de Shenzhen y se reunió con el presidente de la compañía, Wang Chuanfu, como parte de su gira a China. Resaltó que en Sudamérica hay “cero aranceles” para esta clase de inversiones, seguridad jurídica, y propuso Chancay y Arequipa para su instalación.
“Vamos a construir un parque industrial, ya sea en Chancay o en Arequipa. En alguno de estos lugares se podría estar instalando esta industria de ensamblaje de vehículos. En vez de traer desde Perú a China el cobre y el litio, vayan a Perú, a hacer su industria de ensamblaje”, dijo la presidenta.
“Estamos promoviendo cero aranceles para que podamos incentivar que más empresas quieran invertir en el Perú. Desde el gobierno garantizamos un país democrático, con seguridad jurídica, y que lo que se pacta, se respeta”, agregó.