Por Silvanna Mortera
El 1° de septiembre, los antorchistas del Estado de México celebraron 36 años de resistencia. El proyecto que plantó la semilla que hoy es el árbol que brinda sombra a los chimalhuacanos, ha librado con valentía inquebrantable, ataques no solo mediáticos. Hoy, todo Chimalhuacán goza de los frutos del proyecto antorchista que a lo largo de 21 años logró sacar de la miseria al municipio.
Desde el agua con que limpian su hogar, hasta las escuelas donde educan a sus hijos, los centros culturales y deportivos en los que conviven y las calles en las que transitan, son producto del trabajo organizado del Proyecto Nuevo Chimalhuacán, dirigido por Antorchistas ejemplos quienes entregaron su vida a la transformación de raíz del municipio. Su trabajo posicionó al municipio como el sexto mejor gobernado del país, ahora ocupa la posición 115.
Lamentablemente, en 2021 el pueblo chimalhuacano le dio la espalda al proyecto y hoy pagan con creces la traición cometida.
Los índices delictivos se dispararon, la infraestructura municipal se vio deteriorada por el nulo mantenimiento. A la actual alcaldesa morenista, Xóchitl Flores Jiménez, no pudo sostener al municipio y se le cayó de bruces.
De acuerdo con la estadística del Gobierno de México del primer trimestre del 2024, de los 736 mil 415 habitantes que tiene el municipio, el 68.9% padece algún tipo de pobreza. La creciente escazes de empleo ha desplazado a una cantidad importante a vivir de la basura.
Además, el 16.4% de los habitantes perdieron el acceso a servicios dignos de vivienda, salud y educación; mientras que un 8% no recibe ningún ingreso, lo que le prohíbe la solución de sus necesidades básicas como la alimentación y el acceso a servicios de primera necesidad.
Esto impacta profundamente, pues las familias no tienen acceso a la alimentación básica; actualmente la canasta tiene un costo aproximado de 2 mil 300 pesos. Esto los ha obliago a adentrarse en el comercio informal, los tianguis municipales aumentaron a 120 y la delincuencia y presencia del crimen organizado o grupos de extorsión como los famosos colombianos han ganado presencia lacerante. Ahora Chimalhuacán es de los tres municipios más inseguros del Estado de México.
De hecho, sus colonias ahora figuran dentro de las más pobres del país, como la Tlale Xochitenco.
El CONEVAL afirma que son 493 mil 687 pobres en Chimalhuacán, 2 mil 764 tienen piso de tierra, 8 mil 333 viviendas perdieron el acceso al agua potable y otras 648 a drenaje. Ahora sufren de inundaciones que arrazan con las viviendas cada día más deploradas.
Todo esto debe llevar a los chimalhuacanos a recapacitar. Han visto las dos opciones y solo Antorcha —pese a las calumnias, ataques y campañas en contra—, sabe cómo elevar al municipio hacia el bienestar social.
Todos los antorchistas reconocemos el trabajo de nuestros compañeros, enaltecemos su valentía y llamamos al puelo chimalhuacano a decidirse por el proyecto que ya les ha brindado mejores condiciones de vida.
Lo que Antorcha logró en Chimalhuacán es lo que deseamos hacer con todo el país. Sabemos cómo hacerlo. Solo la unidad de las masas y su decisión rotunda por la transformación de nuestro país, nos llevará hacia un mejor futuro, de lo contrario, seguiremos viviendo en carne propia los resultados negligentes de las políticas improvisadas.