Ucrania perdió más de 115 mil militares en menos de dos meses, declaró el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Serguéi Shoigú.
“Durante estos dos meses, el territorio liberado por nuestras tropas sumó 420 kilómetros cuadrados y las tropas ucranianas perdieron, según el Ministerio de Defensa, más de 115 mil militares”, señaló el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Serguéi Shoigú.
Shoigú precisó que Kiev pierde casi 60 mil soldados al mes, lo que “podría detenerse, si se cumplieran las exigencias” planteadas por el presidente ruso, Vladímir Putin, en junio. “Han pasado casi dos meses desde entonces y no hay ninguna reacción”, agregó.
El jefe del Consejo de Seguridad también señaló que cada día de retraso en la toma de decisión resulta en la pérdida de control sobre otra parte del territorio que los ucranianos consideran suya y en la pérdida de miles de vidas humanas.
Según el alto funcionario ruso, no tiene sentido examinar los formatos como la cumbre sobre Ucrania en Suiza y la “fórmula de paz” de Volodímir Zelenski porque “las conversaciones sin un negociador principal no parecen muy claras”.
“La ilusión de que los europeos organizarán para Kiev otra hermosa cumbre de paz, en la que todos sus problemas internos se resolverán por sí mismos, le cuesta caro al pueblo de Ucrania”, enfatizó.
Además, añadió que Occidente y Kiev intentan a toda costa lograr una pausa en las hostilidades en Ucrania para reagruparse.
“Occidente, y recientemente también sus servidores ucranianos, intentan a toda costa lograr una pausa en los combates para otorgar al gobierno inconstitucional de Kiev la posibilidad de reagruparse”, indicó.
El funcionario agregó que Rusia está dispuesta a confiar solo en acciones concretas, no en palabras. Rusia, continuó, no se verá arrastrada a un largo proceso de negociación que podría provocar una pérdida de iniciativa en el campo de batalla. Según el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Occidente obstaculiza “por todos los medios” el progreso en la solución de la crisis ucraniana, “proponiendo iniciativas que son evidentemente inaceptables”.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio por parte del Gobierno de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.