Los países miembros de la OTAN deben prepararse para un escenario de “guerra prolongada” con Rusia, aumentando su gasto en defensa y reforzando sus capacidades industriales, sugiere un nuevo informe publicado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), con sede en Washington.
El informe, titulado “¿Está la OTAN preparada para la guerra?”, fue publicado este martes por el “think tank”, y evalúa los esfuerzos que ha tomado la Alianza para reforzar la defensa y la disuasión desde la Cumbre de Madrid del 2022. Las conclusiones se presentan un mes antes de la cumbre del 75 aniversario del bloque militar en Washington.
En el documento los analistas señalaron que, en los últimos 2 años, los países de la OTAN han hecho “progresos significativos” en la preparación para un posible conflicto con Moscú. Esto se debe en gran parte al consenso adoptado en la cumbre de Madrid, donde Rusia fue calificada como la principal amenaza para la seguridad.
“El informe concluye que se han conseguido progresos sustanciales en el gasto en defensa, la defensa avanzada, las fuerzas de alta disponibilidad, el mando y control, los ejercicios de defensa colectiva y la integración de Finlandia y Suecia, logros que deberían ser reconocidos en la próxima cumbre de Washington”, señalan los expertos.
Sin embargo, el documento asegura que, aunque la OTAN pueda estar preparada para la guerra, la cuestión sigue siendo si está lista para combatir y disuadir en una “guerra prolongada”, cuestionan los autores. “Para alcanzar este objetivo los aliados todavía tienen que gastar más, potenciar su capacidad industrial, abordar las carencias de capacidades críticas y reforzar la resistencia nacional”, destacan.
Anteriormente, el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, no descartó que Moscú pueda revisar su propia doctrina sobre la disuasión nuclear, de acuerdo con las necesidades actuales. Según explicó el diplomático, Rusia se está viendo empujada a hacerlo por las inaceptables acciones de los países de la OTAN.
“Solo puedo decir que la situación tiende a complicarse aún más. Los retos que se multiplican como resultado de las inaceptables acciones de escalada de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN sin duda plantean ante nosotros la cuestión de cómo los documentos básicos en el ámbito de la disuasión nuclear pueden ser adaptados a las necesidades actuales”, reiteró.