En la noche del 13 al 14 de abril, Teherán lanzó más de 300 misiles y drones contra la infraestructura militar israelí en la llamada Operación Verdadera Promesa. Esto sucede después de que el Estado judío atacase el Consulado general de Irán en Siria, dejando varios oficiales iraníes muertos y alrededor de una docena de heridos.
El ministro de Defensa de Israel Yoav Gallant declaró que derribaron el 99% de los drones y misiles con ayuda de sus socios, Francia, Jordania, Reino Unido y Estados Unidos.
Desde Teherán, el Comandante en jefe de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) de Irán Sardar Hossein Salami, expresó que el operativo lanzado contra Israel fue “más exitosos de lo esperado”; aunque la información sobre los ataques no es completa, los informes del campo lo demuestran.
“El régimen sionista debe poner fin a su comportamiento en el pasado y aprender de este paso. Si el régimen sionista responde de alguna forma, nuestra reacción será, sin duda, mucho más dura sobre la base de esta nueva experiencia que hemos adquirido de sus capacidades” aseveró el comandante.
Los misiles hipersónicos lanzados por Irán no fueron interceptados y cayeron en la base aérea de Nevatim, situada al Sur de Israel.