Los estadounidenses están cansados de que su Gobierno financie a Ucrania y de que los recursos del presupuesto nacional se destinen a conflictos bélicos alejados de las fronteras de ese país norteamericano, aseveró el economista estadounidense Jeffrey Sachs en una entrevista con el programa “World Apart”.
“Los americanos no quieren que el Gobierno de Biden gaste el dinero en estas guerras que cuestan trillones de dólares”, dijo Sachs, quien también fue director del Centro de Desarrollo Sustentable de la Universidad de Columbia.
“Ellos ven que el déficit presupuestal es enorme, la deuda sigue creciendo y las autoridades nos dicen que no puede haber servicios de salud, servicios de atención dental, oftalmológica, que los niños no pueden ser atendidos porque no hay presupuesto”, agregó.
“Y luego viene Biden y dice que se requieren 60 mil millones para Ucrania y 14 mil millones para Israel y el Senado lo aprueba, a pesar de la oposición de los estadounidenses”, afirmó el economista.
Jeffrey Sachs recordó que Washington no ha ganado nada de recursos con las intervenciones militares que ha realizado en Siria, en Irak y en Afganistán, y afirmó que el actual conflicto entre Ucrania y Rusia es por la intención de Estados Unidos de expandir la OTAN hacia el Este de Europa, como una forma de presionar geopolíticamente a Rusia.
De acuerdo con el economista, Washington pudo haber tomado la decisión de expandir la OTAN a Ucrania porque quiere ser el mayor poder hegemónico en el mundo y “poner sus piezas en todos los tableros de ajedrez”, o también porque el conflicto ucraniano implica un negocio de billones de dólares al año para las grandes empresas del complejo armamentístico del país norteamericano.
En agosto pasado, la compañía conjunta de armas Raytheon-Lockheed Martin Javelin JV recibió una extensión de contrato superior a los 116 millones de dólares para construir más unidades de lanzamiento de misiles Javelin para el Ejército de Estados Unidos.
Los misiles antitanque Javelin son uno de los armamentos enviados por Washington a Ucrania desde febrero de 2022, fecha en la que comenzó la operación militar especial rusa.
También hubo otra empresa ganadora de contratos del Pentágono: Raytheon Land and Air Defense Systems, que se llevó un acuerdo de 322.5 millones de dólares para construir misiles 2B lanzados por tubo, con seguimiento óptico y guiados por radio.
Con información de Sputnik