A primeras horas del 4 de diciembre, la agencia palestina WAFA informó de la muerte de más 30 personas a raíz de los ataques israelíes contra la ciudad de Gaza.
“Las Brigadas Qassam bombardean Tel Aviv con misiles en respuesta a las masacres sionistas contra los civiles”, publicó la facción armada en su canal de Telegram.
Poco antes, el ala militar de Hamás informó de ataques a otras localidades israelíes, entre ellas las ciudades de Askalón, Sederot y Netivot y los kibutz de Nirim, Nir Ishaq y Nir Oz.
La nueva espiral del conflicto palestino-israelí, ha causado hasta la fecha unos mil 200 muertos y cerca de 5 mil 500 heridos en Israel y más de 17 mil muertos y 41 mil 300 heridos en Gaza, según los últimos datos oficiales.
El 1 de diciembre, al expirar la tregua humanitaria pactada una semana antes con la mediación conjunta de Catar, Egipto y Estados Unidos, las tropas de Israel reanudaron sus ataques contra la Franja de Gaza alegando supuestos disparos por parte de las milicias del movimiento palestino Hamás.
Numerosos países instan a Israel y Hamás a establecer un alto el fuego; también se multiplican las voces a favor de una solución de dos Estados como única vía posible para lograr una paz duradera en la región.
Con información de Sputnik