Es Balcones del Sur el primer intento de proyectar una colonia antorchista en la capital poblana. En próximos días, se cumplirán 40 años de la fundación de este asentamiento que comenzó con un pequeño grupo de familias pobres que no tenían un hogar y que se acercaron al Movimiento Antorchista para que los dirigiera y así darle solución a la falta de vivienda que adolecían.
Los logros materiales que hoy hay en esta extensión territorial, que comprende no sólo a Balcones, sino a todas las colonias como La Fraternidad, Ampliación Balcones, La Antorchita, La Azteca, El Valle, Chinampas y Ampliación Azteca (que fueron fundadas durante este proceso de desarrollo y crecimiento que se ha dado en el sur de la capital por razones económicas y, a su vez, por el trabajo organizado del pueblo pobre), son muchísimos y de un peso muy importante.
Mencionaré, en primer lugar, que hay en la zona un proyecto educativo impulsado por el antorchismo cuyo objetivo es darle a las juventudes la oportunidad de acercarse a la ciencia y también a la cultura, arte y deporte; por medio de talleres que permiten en ellos un desarrollo multifacético, que los hace ser sensibles, críticos y políticos ante las injusticias sociales. Por esta razón, en su momento y tras una larga lucha se fundó el Preescolar Mayoxóchitl, la Primaria Escudo Nacional, la Técnica No. 88, el Bachillerato Benito Juárez García y la Normal Superior Margarita Morán Veliz.
En segundo lugar, tenemos que la evolución que se ha dado en estas colonias ha sido tanta, que al día de hoy, casi todas las calles están pavimentadas, se cuenta con luz, drenaje y agua potable, así como se cuenta con la monumental Casa de la Cultura a la que se le dio el nombre de Aquiles Córdova Morán, quien es nuestro querido dirigente nacional, y la Unidad Deportiva, que lleva el nombre de Lenin Campos Córdova, quien fundó esta colonia junto con un grupo de jóvenes que vivían en la Casa del Estudiante Serrano y Carmen Serdán; ambas estructuras ofrecen distintas actividades para los jóvenes y adultos que deseen recrearse y mantenerse sanos física y espiritualmente.
Estos y algunos otros son los logros materiales que se han tenido durante 40 años de lucha organizada en Balcones del Sur, pero de manera particular quiero hablar de un tercer aspecto importante, que para mí es de los logros más trascendentes que hay en dichas colonias. Logro que sin duda hace que este conjunto sea diferente, emblemático y único en su especie.
Es pues, la unidad del pueblo pobre el logro más significativo de todos. Es verdad que los líderes que han pasado por esta colonia han jugado un papel importantísimo. Nadie puede negar la entrega y abnegación con la que los líderes han desempeñado su papel de faros que alumbran el camino de los más necesitados, como ejemplo tenemos al gran Lenin Campos y ahí está, actualmente, nuestra querida Lluvia Sánchez.
Sin embargo, quiero resaltar el hecho de que comerciantes, amas de casa, obreros y demás se hayan decidido a dejarse dirigir y a unirse con el objetivo principal de mejorar sus condiciones de vida, es algo muy significativo. Es sin duda, uno de los logros más importantes, porque resulta y resalta que la gente que ahí vive pertenece a la clase trabajadora y el hecho de que se reconozcan como tal y encaminen su lucha para obtener la resolución de sus problemas, como clase, los hace ser un conjunto de colonias cuya lucha ha adquirido una categoría superior, la categoría de lucha revolucionaria.
Entonces, este 24, 25 y 26 de noviembre festejamos 40 años de la unidad de los trabajadores que habitan Balcones del Sur; celebramos la organización y entrega de una clase para sí misma. A mi parecer eso es a lo que deben aspirar todas las colonias antorchistas y no antorchistas, a alcanzar la unidad del pueblo trabajador para la acción revolucionaria, que es la que nos ayudará a librar a los hombres y mujeres de su condición de miseria, requisito necesario para que este sistema opresor se siga reproduciendo. En otras palabras, debemos aspirar a la unidad del pueblo para el derrocamiento del capitalismo y así abrirnos paso para la edificación de una sociedad más justa. ¡Enhorabuena, Balcones del Sur! Hay que seguir adelante, siempre adelante… como un solo hombre.