Por Rosa María Dávila Partida
Las autoridades del Tecnológico Nacional de México informaron al Campus de Tecomatlán dos hechos de suma gravedad: por concepto de ‘gasto directo’, en lugar de los 3 millones 600 mil pesos de años anteriores, solamente recibirá un millón 600 mil pesos, es decir, le quitan dos millones. Además, no podrán ocupar 13 plazas de personal que ya está en su plantilla, pues fueron congeladas por órdenes de la Secretaría de Hacienda hasta enero del próximo 2024. De este modo se consuma un nuevo golpe contra la educación del pueblo, ahora en este tecnológico que lleva 39 años formando ingenieros especialistas en agronomía y otras áreas, y del cual egresarán 114 jóvenes al concluir su ciclo escolar.
El ‘gasto directo’ es la única partida con que las autoridades federales apoyan el funcionamiento de esta institución superior, y se destina a pequeñas obras de infraestructura y mantenimiento menor. Llegar a los 3 millones 600 mil pesos costó largos años de gestiones y lucha, antes se recibía menos de un millón al año. Ahora, como fruto de la política de austeridad impuesta desde la presidencia de la república, se le arrebata este recurso.
El congelamiento de las plazas es otra de las medidas de ‘austeridad’ con que se golpea a los planteles y se perjudica directamente a los docentes que, por una u otra razón, venían ocupando dichas plazas interinamente y ahora se quedan colgados de la brocha, y también a los alumnos que se les priva de sus maestros.
Previo a este congelamiento, se había tomado la medida de que los interinatos solo se pagarían de manera intermitente, es decir, al concluir el interinato no se podían renovar, debían pasar cerca de tres meses para que se autorizara nuevamente. Así se llega a situaciones muy perjudiciales: el interinato empieza el 16 de febrero, cuando las clases iniciaron desde el 30 de enero; y concluye a mediados de mayo. Ni el docente puede vivir de su trabajo, ni los alumnos reciben sus cursos completos, por poner un ejemplo.
La información arriba mencionada fue expuesta por las autoridades del TecNM a Gabriel López Salvador, director del Instituto Tecnológico de Tecomatlán, el viernes 7 de julio, alegando que sólo siguen instrucciones superiores. Y así es, en efecto, las decisiones se toman al más alto nivel y la tarea de ellos solamente es aplicarlas.
Las consecuencias de esta política de austeridad, aplicada a la contratación de personal docente, son altamente nocivas: maestros con salarios truncados que abandonan los cursos buscando la forma de completar su sustento; alumnos que ven pedazos de los programas escolares y que afecta el recurso disponible en los planteles, ocasionando falta de reparación y mantenimiento de servicios e instalaciones de los planteles, carencia de recursos para funciones de vinculación con los productores, para no hablar de la obtención de certificaciones y acreditaciones, etc., etc.
Ante estos hechos surge la pregunta: ¿López Obrador y compañía quieren que alumnos y maestros deserten para cerrar las escuelas públicas? Y la respuesta también es sencilla. Si no se lo propusieron con esa claridad, lo están logrando. Es una prueba más de que Morena no quiere el desarrollo económico y social del país, no quiere construir un México próspero y generoso con sus hijos.
El modelo de la 4T para la educación superior son las Universidades Benito Juárez con pocos maestros mal pagados, laborando en instalaciones deplorables. Así cobran sentido varias de las acciones de su gobierno, como la desaparición de fideicomisos para sostener la investigación científica y la formación de especialistas en el extranjero; la embestida para destruir el funcionamiento abierto y plural del CIDE; el asedio a la UNAM.
Todos estos hechos demuestran la indiscutible necesidad de que el pueblo entienda el daño tan profundo que se le hace al dinamitar la educación pública, para que se disponga a defender las escuelas de sus hijos y, con ello, su futuro como nación que pretende alcanzar un desarrollo independiente. La defensa de la educación pública es una tarea impostergable que reclama la participación de todos los ciudadanos bien nacidos. ¡Adelante!
