Se recrudece la violencia en el país, desde la mañana del sábado hasta la noche de este lunes las redes sociales y los medios de comunicación locales han dado cuenta del estado de guerra que se vive en Chilpancingo, capital de Guerrero.
En un principio se estimaba que los manifestantes que tomaron la México-Acapulco y la Autopista del Sol pretendían la liberación de dos líderes transportistas, sin embargo, ellos han desmentido esta versión, pues lo que reclaman es la violenta jornada que se ha vivido en el estado a manos de la delincuencia organizada y en contubernio con el gobierno estatal y municipal.
De acuerdo con el informe de seguridad del Gobierno de México, del 1 al 7 de julio el país registró 469 asesinatos, estando Guerrero entre uno de los estados que más ha aportado a la cifra. La polémica reunión de Norma Otilia, alcaldesa morenista de Chilpancingo, con un líder del crimen organizado es la clara fotografía de la línea presidencial de «abrazos no balazos», sin embargo, esta «estrategia» de seguridad no ha dado los frutos esperados.
Bajo la administración de Andrés Manuel López Obrador el acumulado total es de 159,703 homicidios dolosos en el país, mientras tanto la ola de violencia azota sin piedad al pueblo mexicano, que ve arder hoy otra de sus capitales, Chilpancingo.