Hechos lamentables se suscitan en todo el estado y el país, mientras comienzan los «recorridos» de los aspirantes morenistas, que lejos de preocuparse por gobernar bien y solucionar los problemas de la población se han embarcado en un juego del que los mexicanos solo verán el show pues la elección está dada.
En tanto, los aspirantes a la gobernatura de Puebla siguen implacables los mismos pasos que sus compañeros a nivel nacional, las pintas siguen en la capital y las declaraciones sobre posibles licencias y reelecciones ya se escuchan.
Por otro lado, la inseguridad rebasa a las autoridades, la normalización de la violencia ha generado en los últimos estudios que la percepción social de inseguridad haya bajado, no obstante, la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, a nivel nacional, en marzo de 2023 revela que el 62.1 por ciento de la población de 18 años y más consideró inseguro vivir en su ciudad.
A diario hay crímenes por todos lados que delatan falta de acción por parte de quienes son los encargados de impartir justicia y velar por la ciudadanía, actos despiadados como los de una joven que priva de la vida a un animal indefenso, un padre que degolló a sus hijos, unos encapuchados que entran a una escuela, amenazan, golpean e impunemente huyen.
En tanto, nuestras autoridades aún pintan de color vino-marrón que buscan la continuidad de este proyecto (!) ¿Cuál? ¿El de violar la ley a favor de sus intereses? ¿o el de hacer caso omiso a las necesidades del pueblo? Veremos cómo se desarrolla el circo preelectoral.
