Aunque las recientes lluvias y el clima frío de los últimos días parezcan un descanso a los fuertes calores que se han registrado en el estado de Puebla, la Conagua anunció que continuará el ambiente caluroso a muy caluroso en gran parte del territorio.
Ante esta situación, el riesgo de ser víctima de un golpe de calor es muy elevado, por lo que a continuación, te presentamos algunas recomendaciones para hacer frente a las altas temperaturas.
¿Cómo hacerle frente al calor en Puebla?
Ante las altas temperaturas, la Secretaría de Salud del estado de Puebla y el mismo SMN recomiendan a la población tomar medidas preventivas para evitar enfermedades o bien, un golpe de calor.
Algunas de las recomendaciones son:
• Para protegerte de un golpe de calor y de daños en la piel, como quemaduras, así como cáncer de piel, evita el sol de 11:00 a 15:00 horas, tiempo en que alcanza sus niveles más altos
• Busca lugares con sombra, frescos y ventilados, con el fin de evitar que la temperatura corporal incremente
• Toma 2 litros de agua para mantenerte hidratado (a).
• Usa ropa con colores claros que protege de los rayos UV.
• Si es estrictamente necesario salir, utiliza protector solar (con protección mayor a 30 para piel delicada), gorra o sombrero, lentes de sol y/o sombrilla.
¿Cómo sé si me está dando un golpe de calor?
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un golpe de calor se identifica cuando la temperatura de tu cuerpo supera los 40 grados centígrados, más de lo que se considera la temperatura normal de nuestro organismo (37 grados centígrados).
Entre los síntomas más importantes que nos pueden indicar que alguien está sufriendo un golpe de calor son:
• Mareo
• Sudoración excesiva al principio, después, falta de sudor
• Enrojecimiento y sequedad de la piel
• Fiebre con temperatura desde 39 a 41°C
• Comportamiento inadecuado, como por ejemplo: comenzar a quitarse la ropa sin importar el lugar
• Aceleración del ritmo cardíaco, con latido del corazón débil
• Dolor de cabeza
• Ataques con convulsiones
• Piel que se siente caliente y seca pero no sudorosa
• Confusión o pérdida del conocimiento
• Vómitos frecuentes
• Falta de aire o problemas para respirar
Si notas que tú o alguien empieza a presentar estos síntomas, el Instituto recomienda que primero lo lleves a un lugar más fresco (un sitio abierto, pero con sombra, por ejemplo). Después, empieza a tratar de bajar su temperatura con una tela mojada en ingles y axilas. En caso de no notar una mejoría, se recomienda acudir a urgencias inmediatamente.