“Barbosa no murió, su conciencia lo mató, por los desaparecidos, el infierno lo llamó”, fue la consigna repetida por los familiares de personas desaparecidas en Puebla, durante sus movilizaciones este 8 de marzo.
De esta manera, las víctimas de desaparición forzada externaron su molestia con la política del fallecido gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, quien minimizó los casos de mujeres no localizadas, al señalar que “se iban con los novios”.
La misma política que ahora sigue el gobernador sustituto de Puebla, Sergio Salomón Céspedes, ya que la Fiscalía de Justicia, en manos de Gilberto Higuera, que sigue sin presentar resultados en la localización de personas.
“Ninguna denuncia presentada por desaparición camina en la Fiscalía”, aseguró María Luisa Núñez, vocera del colectivo La Voz de los Desaparecidos, durante una protesta afuera de dicha dependencia.
Antes, realizaron una ceremonia religiosa frente a la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, para después dirigirse al zócalo de la ciudad, donde colocaron los rostros de cientos de personas desaparecidas.